Existen distintos tipos de suelos en las pistas de pádel reglamentarias: de césped artificial, hormigón poroso, cemento, materiales sintéticos como resinas, e incluso de madera.
Sea cual sea el material elegido, la superficie de la pista de pádel siempre debe ser plana, horizontal y uniforme, tiene que permitir un bote regular de la pelota y evitar el encharcamiento.