
Los diferentes tipos de palas de padel se distinguen por su forma, su tamaño y su material. Elegirlas de una u otra es algo que influirá de manera importante en nuestro juego, ya que la pala es lo más importante del equipamiento en el pádel.
Índice
Tipos de palas de pádel según su forma
Dependiendo del tipo de forma que tenga la pala, esta puede ser de diamante, de lágrima o pera y redonda. Cada una nos dará unas prestaciones diferentes, tendrá un comportamiento a la hora de golpear la bola y, sobre todo, está pensada para fomentar determinados aspectos del juego.
Palas de pádel diamante
Su característica principal es muy clara: son palas pensadas para la potencia en el golpeo. Tienen la parte de arriba un poco más achatada, y es en esta parte donde se concentra el peso de la pala. En detrimento de ese punto a favor, estas formas suelen ser mucho más complicadas de manejar a la hora de controlar el golpe, por lo que están pensadas para jugadores expertos.
Sobre todo, donde más se notan las palas de pádel diamante es cuando estás en la red, ya que cuesta más controlar los golpes y manejarlas a la hora de las voleas. Sin embargo, en los remates altos ganas mucha más potencia; son ideales para sacar la bola fuera de la pista.
Si tienes mucho nivel de juego y brazo como para terminar los puntos mandando la bola muy lejos, esta puede ser tu pala; al principio te costará adaptarte a la hora de defender en la red, pero con el tiempo te puede dar muchos puntos ganadores.
Un ejemplo de este tipo suelen ser las palas Adidas.
Palas de pádel redonda
Como ya comentamos, las palas de forma redonda son las perfectas para los que están empezando. Si tienes un nivel de pádel amateur y no llevas más de 3 meses dándole duro, este tipo de palas te dará el control y el equilibrio que necesitas.
Su forma hace que el punto dulce lo tenga en el centro, facilitando así mucho la defensa de los golpes y garantizando una buena respuesta al golpeo de la bola (aunque aquí intervienen otros factores).
Un ejemplo de este tipo suelen ser las palas Bullpadel.
Palas de pádel lágrima
La combinación perfecta de la pala de diamante y la redonda. Su forma intermedia entre ambas hace que sus prestaciones también sea una mezcla de las dos. Es decir: potencia con control.
Son perfectas para quienes llevan un tiempo jugando pero no son los mejores de la pista. Cuando empezamos a pensar en cómo atacar al rival y no solo en devolver las pelotas es el momento para comprarse una pala de lágrima.
¿Esto significa que la pala de diamante es siempre aconsejable para los jugadores de nivel? No, de hecho, hay mucho jugón que sigue con una pala de pera; depende un poco del estilo, de cómo te guste golpear. Si eres de los que buscan pegarle fuerte, sacarla fuera y rematar sin descanso, entonces sí.
Sin embargo, hay gente, incluso profesionales, que prefiere optar por golpes más técnicos, suaves, cortados, pero igual de efectivos.
Es decir, tu forma de pala preferida la elegirás tú con el tiempo y con partidos, dependiendo de tu gusto, el estilo que cojas y el tipo de golpes al que te acostumbres.
Un ejemplo de este tipo suelen ser las palas Víbora.






















